Los espacios de coworking son oficinas compartidas por profesionales que trabajan de manera independiente o como freelancer. Estas oficinas ofrecen ambientes tranquilos, que la hacen un lugar adecuado para trabajar y concentrase en lo que están creando o desarrollando. Así se puede decir que los trabajadores independientes le dan más significación e importancia a su trabajo, ya sea porque eligen el proyecto que les interesa o se concentran de tal manera para que sea un éxito. A continuación veamos una lista de razones del porqué la gente se desarrolla mejor en estas oficinas.
Poca competencia
A diferencia de una oficina tradicional, los espacios de coworking se componen por miembros que trabajan en diferentes compañías, empresas y/o proyectos. Lo que hace que la competencia, directa o interna, no se sienta. Por lo tanto, los trabajadores que se encuentran laborando en una coworking, no se sientan forzados a convertirse en un personaje que trabaja para encajar en la oficina. Asimismo, trabajando en medio de la gente que realiza diversas actividades, puede hacer que la propia identidad de trabajo sea más fuerte y significativa.
La cultura de la solidaridad
Otra razón importante por la que la gente se desarrollan más en los espacios de coworking es trabajar en una cultura, en la que una de las normas es ayudarse el uno al otro. Ya que hay muchas oportunidades para hacerlo. Mas aún si consideramos en la variedad de trabajos y habilidades únicas que realizan y tienen los compañeros.
Eligen cómo y dónde trabajar
Los espacios de coworking son normalmente flexibles, tanto al horario y a los espacios. Esto quiere decir que la gente puede decidir, si desea trabajar todo el día, medio día o solo horas. De hecho esto les sirve para controlar el progreso de sus trabajos. Y si estos están en positivos pueden elegir tomar un largo descanso en la mitad del día o seguir laborando. Asimismo, pueden elegir si quieren trabajar en un espacio tranquilo para concentrarse mejor, o en un espacio de mayor colaboración con mesas compartidas donde se fomenta la interacción.
Crean rutinas y disciplinas
Si bien es cierto que los trabajadores independientes adoran su autonomía, también se valora de alguna forma la rutina y disciplina que se crea en los espacios coworking para llevar adelante la vida profesional. Ya que el exceso de autonomía, muchas veces, puede paralizar la productividad al carecer de rutinas. Por ello, la comunidad que se encuentra en estos espacios de trabajo, no solo es importante porque ayuda a crear estructuras y disciplina, sino que los motiva. Ya que se sienten parte de una comunidad.
Crea conexiones
Las conexiones con otros son una gran razón por lo que la gente prefiere pagar para trabajar en un espacio de coworking, en lugar de trabajar desde casa de forma gratuita o alquilar una oficina. Ya que casa espacio tiene su propio ambiente, y los gerentes de cada espacio hacen grandes esfuerzos para cultivar una experiencia única que satisface las necesidades de sus respectivos miembros. Sin embargo, se debe destacar, que la socialización no se fuerza, ni se obliga. Los miembros pueden elegir cuándo y cómo interactuar con los demás.
Ayudan a la creatividad
Trabajar en un espacio de coworking también puede ayudar a generar nuevas ideas. Con base en el conocimiento y a la retroalimentación entre los miembros. Ya que a tu alrededor puedes encontrar personas que le darán diferentes enfoques a tu proyecto, lo que ayudará a mejorar la creatividad para tus proyectos.
Crean comunidades
Para permitir más conexiones, ayudan a las personas a relacionarse entre si, construyendo comunidades que van más allá de las reuniones de trabajo. Los espacios de coworking no sólo se convierten en un lugar de trabajo, sino que también realizan eventos de redes, programas de capacitación, eventos sociales, e incluso un campamento de verano.
Les permite ser auténticos
Los espacios de coworking dan a la gente la libertad y apoyo para ser sus auténticos. De esta manera, los miembros de esta comunidad de coworking se sienten más comprometidos con la organización para la que trabajan, y son más propensos a ser más creativos. Por otro lado, no tienen que vestirse de una forma determinada para sentirse bien dentro de la oficina. En las coworking se sienten ellos mismos.
Tienen más control de sus trabajos
Como ya dijimos antes los espacios de coworking son flexibles tanto en el horario, como en los ambientes. Lo que hace que la gente decida ponerse un plazo para terminar sus trabajos, de acuerdo al horario que pueda elegir. De esta manera irá controlando el progreso de su trabajo y verá sus limitaciones. Incluso, si lo requiere, puede decidir trabajar desde casa, sin repercusiones. Esto generalmente sucede, si necesitan realizar una reparación o hacer frente a una necesidad de algún miembro de la familia.
Es importante destacar la socialización que se da en estos espacios de trabajo en común. Los cuales se dan de maner natural. Los miembros pueden elegir cuándo y cómo interactuar con los demás. Ellos son más propensos a disfrutar de las discusiones sobre el café en el café, ya que se va a la cafetería para tal fin. Y cuando necesitan un descanso, lo pueden realizar sin ningún problema.
Todo a bajo costo
Bueno en este último punto, voy a señalar que parte del buen desarrollo profesional de las personas que trabajan en los espacios coworking, se debe al bajo costo. Es decir que se puede tener todo lo que se tiene en una oficina propia, pero a un bajo costo. Y lo mejor de todo es que no tienes que preocuparte en los pagos de los servicios como Internet, teléfono, entre otras cosas. Porque todo lo realizan las personas responsables de este sitio. Lo trabajadores solo van a laborar y a enfocarse en sus proyectos creativos.
Como hemos visto las oficinas compartidas se han convertido en una opción importante para los trabajadores independientes, que quieren desarrollarse en sus trabajos y/o proyectos compartidos.
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